Presentación y justificación

En 1900, el investigador alemán y premio Nobel Paul Ehrlich propuso el concepto de “bala mágica”. Las balas mágicas fueron idealizadas como medicamentos especiales con propiedades químicas y biológicas que permitirían a los agentes encontrar y matar con precisión focos de enfermedades sin dañar los tejidos sanos. Más de 100 años después de su propuesta, este concepto sigue vigente e influye en la búsqueda y el desarrollo de tratamientos moleculares específicos y eficaces minimizando los efectos secundarios para enfermedades humanas, principalmente en cáncer. Recientemente, se han utilizado términos como medicina personalizada, medicina dirigida y medicina de precisión para representar esta idea.

La terapia con radiofármacos (TRF) hace uso de esta idea al utilizar un ligando, con afinidad por una diana concreta, marcado con un radionúclido capaz de causar la muerte celular o de alterar su capacidad de replicación.

El concepto no es nuevo en Medicina Nuclear, cuya vertiente terapéutica se desarrolló desde sus inicios. Así, en 1941, Saul Hertz realizó la primera administración terapéutica de yodo radiactivo a un paciente con hipertiroidismo tras haberlo estudiado previamente con el mismo radionúclido y en 1946 Seidlin publicaba el primer estudio sobre la terapia con yodo radiactivo en cáncer de tiroides metastásico utilizando el mismo compuesto radiactivo para diagnóstico por imagen, confirmación de expresión diana y posterior terapia con radionúclidos.

Posteriormente, en 1981, James Sisson demostró que la metayodobencilguanidina (MIBG), un análogo de la norepinefrina que se concentra en el tejido nervioso simpático, radiomarcada con 131I, se concentra en las feocromocitomas. Poco después, en 1984, Hattner y Kimmig publicaron, de forma independiente, la captación de 131I-MIBG en dos pacientes con neuroblastoma.

La 131I-MIBG se introdujo en la década de 1980 inicialmente para uso diagnóstico, pero seguidamente, mediante el incremento de la actividad de marcaje, como una terapia dirigida potencial para pacientes con feocromocitoma o paragangliomas progresivos y/o sintomáticos que expresan el transportador de norepinefrina (NET) en las membranas de las células tumorales.

Más tarde, con la aparición de la MIBG marcada con 123I se mejoraba la calidad diagnóstica previa al tratamiento dando un paso más hacia la combinación de diagnóstico y terapia con radiofármacos.

Se perfilaba de esta manera un modelo de TRF que avanzaba en el concepto de medicina personalizada en medicina nuclear, en la que se utiliza un mismo ligando para el diagnóstico y para el tratamiento, pero marcándolo en cada caso con un radionúclido distinto o con una actividad distinta de un mismo radionúclido, configurando un binomio de biomarcador predictivo y agente terapéutico.

Se trataba de la teragnosis tal como lo entendemos en la actualidad y que en el nuevo siglo ha tenido un desarrollo exponencial en la producción científica, con una implantación progresiva en el ámbito asistencial y que está en plena expansión debido a la creciente disponibilidad de nuevos radiofármacos.

La incorporación de estos nuevos procedimientos que, tanto a nivel diagnóstico como terapéuticos, van alcanzando las primeras líneas de elección en distintas guías de práctica clínica, exigen la actualización constante de conocimiento, la disponibilidad de recursos y la incorporación a los equipos multidisciplinares junto a otras especialidades sanitarias.

En la confección de este proyecto se ha decidido no incluir estándares que son de obligado cumplimiento y que están regulados por ley. Por lo tanto, aspectos cómo, entre otros, disponer de un activímetro calibrado y con las oportunas certificaciones de verificación, que permita medir la actividad de los radiofármacos que se van a administrar, medios de blindaje según el isotopo que se utilice, almacenamientos de residuos radiactivos, gammateca, disponer de Plan Estratégico, equipos entrenados, bunker, protección radiológica, protocolos específicos (gestión, administración de radiofármacos, tratamiento, gestión de residuos y descontaminación de habitaciones) y aspectos relacionados con la dosimetría estarían garantizados con la vigencia del certificado normativo.

CerrarEste sitio web solo utiliza cookies técnicas. Puede consultar la política de cookies. Aceptar
Patrocinado por:
Novartis
Avalado por:
Semnim
Sedisa
Serfa